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martes, 18 de septiembre de 2018

UNA VIDA VACÍA, ES UN ALMA LASTIMADA POR EL SUFRIMIENTO... DECEPCIONES Y DESILUSIONES SIN ESPERANZA...


Una vida vacía y lastimada sin esperanza,  es el resultado de sufrimientos... decepciones, desilusiones, desamores y principalmente por falte de amor por si mismo y por miedo a volver a amar...Una vida vacía no tiene sentimientos de amor en el alma y viaja a la deriva sin timón, sin fe y esperanza...Pero aunque se vea todo perdido, tenemos el amor y bondad de Dios... Para restaurar nuestra vida y llenarla de amor, para ver un nuevo amanecer y creer nuevamente que el amor es bello y es hermoso compartirlo  con los demás.
 La fe es creer que uno puede, es creer que Dios existe y es bondadoso, es la unión entre la voluntad y la esperanza, es la creencia que nos sostiene. Es la certeza de lo que se espera y la evidencia de lo que no se ve. Es obrar consecuentemente con lo que uno cree.

La fe es esa mano amiga que nos encamina por el camino de la determinación y es nuestra excusa para vencer lo imposible.
Si algún día piensas que has perdido todo, no pierdas tu fe, porque entonces estarás perdiendo también lo que podrás recibir de Dios.
Cuando encuentres a alguien con quien los silencios se vuelven una canción y a su lado la vida te parezca más liviana, es el camino correcto la respuesta a tus deseos y oraciones.
 La felicidad no depende de lo que te falta, sino del buen uso que le da a lo que tienes.
Quiérete tal y como eres, porque tal y como eres, te aceptará quien realmente sienta aprecio por ti.
La vida no se mide por la cantidad de aire que respiras, sino por los momentos en que tu corazón palpite fuerte: de tanto reír, de sorpresas, de éxtasis, de felicidad y sobre todo de querer sin medida. (Picasso.)...
  No tomes una decisión permanente por una emoción temporal.
- Quien te quiera en tu otoño y se enamore de tus ramas sin hojas, incluso te soporte en tus tiempos de invierno; sin duda esa persona merecerá tu primavera.

Deja que el universo te hable. Escucha con atención lo que te rodea. No pases cerca de una flor sin guardar un breve recuerdo de su belleza. Detente, observa, escucha, huele, toca. El mundo es comunicativo y generoso y siempre tiene algo que decirnos.
 Detrás de ti solo hay recuerdos, a tu lado personas que te quieren, al frente un futuro hermoso y arriba un Dios que te escucha, te cuida, te ama y te bendice.

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