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domingo, 25 de agosto de 2013

MI FE, EN DIOS, ES MÁS FUERTE Y PODEROSA QUE EL CÁNCER...ESTE PODRÁ QUITARME LA VIDA, MÁS NO ESTAR CERCA DE DIOS...


El cáncer se ve tan poderoso, pero en realidad no lo es  porque no puede 


destruir la paz, ni matar la amistad. Se ve tan destructivo pero en realidad 

no puede destruir los recuerdos ni las memorias ni apagar el coraje ni siquiera

 invadir el alma.

El cáncer está limitado.


Nos asusta el cáncer y aún que parezca un poderoso gigante en realidad no lo 


es, porque hay algunas cosas que el cáncer no puede hacer. No puede robarme 

la vida eterna ni conquistar mi espíritu.

No puede romper los lazos de mi familia, porque más bien nos unimos más en 


medio de la adversidad.

El cáncer está limitado...


El cáncer no puede tocar mi ser interior porque las células de mi ser interior son


 invencibles e invulnerables.

Esta mujer exterior se puede desgastar pero el interior se renueva día tras día.


Hay una esperanza que crece y un amor que se solidifica con el poder inmenso 


de la presencia divina en mi corazón.



Si una enfermedad ha invadido tu vida, no permitas que toque tu espíritu. 

Tu cuerpo puede quedar gravemente afectado, débil y aun con 

deficiencias y tal vez enfrentes una gran lucha. Pero no es así con el ser 

interior, el apóstol dijo: “Por tanto, no desmayamos; antes aunque este 

nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se 

renueva de día en día”. Posiblemente Pablo sufría una enfermedad, ante 

esto dijo: “Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se 

perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más 

bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”.



Hoy puedo mirar con gozo a pesar de la angustia que me rodea y mirar más allá


 de la medicina, de la quimioterapia y sus consecuencias para decir…

por dentro me estoy renovando para Dios.

El cáncer puede destruir mis ahorros terrenales, pero no podrá tocar los 


celestiales por que ni el ladrón lo hurta, ni el moho los contamina.

El cáncer podrá destruir mis células pero jamás mi corazón, por que él está en 


la mano Dios.

El cáncer podrá tirar mi cabello a tierra, pero nunca mi confianza en Dios, quién 


es mi castillo y mi refugio...

Y en última instancia el cáncer podrá destruir mi cuerpo, pero Dios, puede


 destruir el cáncer con el poder de su Palabra,porque él es Él Dios, mi sanador!!!

Que es el cáncer... comparado a una eternidad junto a Dios...



Nuestro cuerpo puede estar abatido, por lo cual nos sentimos débiles y se 

desgasta aún sin una enfermedad, pero nuestro espíritu se puede renovar

 y fortalecer diariamente cuando invertimos tiempo con el Señor Jesús...

La fe en Dios y la esperanza de un nuevo amanecer en plenitud es lo que 

debemos guardar siempre en nuestro interior...


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