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sábado, 12 de septiembre de 2009

POEMAS DE AMOR DE AGRADECIMIENTO A DIOS.



AGRADECIDO ME SIENTO
Agradecido te miro por el pasillo andar,
Agradecido te digo que vale la pena contemplar
juntos ,muy juntos el sol cuando se va ocultar.

Por que no estar agradecido
si todo el me lo vino a regalar
cuando nada poseía
cuando casi no veía
ni mi corazón sentía
y menos podía palpitar.


El extendió su mano y me invito a comenzar
una nueva trayectoria
que no podía imaginar.

El y yo comenzamos por el sendero nuevo a transitar
y en el proceso tu yo nos vinimos a encontrar.
Y ya no dos sino tres continuamos el andar.
Dime si no hay motivos para agradecido estar.

Gracias Señor. Tu amor es tan especial que cada día lo puedo palpar, en las pequeñas y en las grandes demostraciones de tu impresionante dar.

Porque olvidarme hoy de tu bondad y tu amor. Déjame elevar ante ti esta nota con fervor . Y así con un corazón abierto decirte..Muchas gracias Mi señor.

Gracias Señor….recibo con gozo todas estas muestras de tu bondad..y quiero no solo disfrutarlas pero compartirlas con otros. No quiero hoy contaminar las vidas de otros con lamentos y quejas…quiero llevarles la nota de agradecimiento que tanto han anhelado escuchar .


Serafín Contreras Galeano
¡ESCÚCHAME, SEÑOR!

Gracias te doy, oh Dios incomparable,
por tu Santa Palabra inmaculada,
en la cual me alumbró la llamarada
del fuego doctrinal del Admirable.

Salióme al paso en mi senda oscura
con todo su esplendor y su clemencia,
siendo mi Salvador por excelencia
al hacerme una nueva criatura.

Por eso en la hora sacrosanta
que sube mi oración Tu Trono,
recibe mi alabanza en el tono
que mi alma gozosa a Tí canta.

Hoy, al llegar la fecha señalada
en que cumplo, Señor, estos mis años,
olvidando los negros desengaños,
vivo en la paz de tu bondad sagrada.

Así, pues, apoyado en el glorioso
cayado del Mesías, del Ungido,
te diré con acento redimido
¡que sólo en Jesucristo soy dichoso!.

Autor del poema: Manuel Pérez del Busto.


No hay sombra que pueda tapar la luz del Sol mucho tiempo.
No hay pena que pueda tapar la fe en Dios, ni nube que pueda 

lograr que su bendición no llegue a ti tarde o temprano.